Consumo de semillas

Son uno de los pocos alimentos que mantienen sus propiedades nutricionales casi intactas por un largo periodo si se mantienen en un ambiente adecuado protegidas del sol y de la humedad.

Existen una gran variedad de semillas comestibles, de las cuales se ha desaprovechado su rico valor nutricional como un alimento completo, por lo regular se emplean como ingrediente adicional de alguna receta convencional en la comida tradicional, sin embargo por si solas son un alimento natural que debes tomar en cuenta para incluirlo en tu dieta diaria, aportan nutrientes esenciales como proteínas, carbohidratos, vitaminas, fibra, grasa vegetal y minerales.

Cómo consumir semillas

TIPS

*     Molerlas antes de consumir. No compres semillas trituradas: al partir las semillas pierden rápidamente sus propiedades y sus aceites se enrancian. Puedes usar un mortero, un mixer o licuadora.

*     De preferencia consumirlas crudas, si las vas a tostar que sea lo menos posible. El calor destruye los nutrientes.

*     SIEMPRE LAVARLAS ANTES DE CONSUMIR. Las semillas pueden contener bacterias y principalmente hongos. Es recomendable lavarlas y sumergirlas en agua con peroxido de hidrógeno (1 cda sopera por cada litro de agua) durante 10 minutos.

*     Comprá envases cerrados y no las que vienen a granel (son más factibles de estar contaminadas).

*     Incorporalas a todas tus comidas: Podés tenerlas listas en un recipiente de vidrio con tapa hermética, mezclá y/o triturá tus semillas preferidas y guardarlas en la heladera no más de una semana.

*     Ideal: armá un germinador casero y disfrutá de germinados ricos en nutrientes y vitaminas FRESCOS todos los días.

Procedimiento: lavar las semillas, colocarlas en un frasco de vidrio limpio (si es esterilizado mejor) tipo mermelada, colocarle en la boca del frasco una gasa sujeta con una goma elástica para evitar que entren insectos, dejar el frasco acostado en un lugar con poca luz. Agregar suavemente agua para lavar  2 o 3 veces al día y dejar escurrir, volver a la posicion acostada. En pocos días, lo que va a  depender de la semilla elegida, verás brotar las semillas. Cuando tengas 2 o 3 cm y empiezen a aparecer las primera hojitas ya pueden ser consumidas.

Son uno de los pocos alimentos que mantienen sus propiedades nutricionales casi intactas por un largo periodo si se mantienen en un ambiente adecuado protegidas del sol y de la humedad.

Existen una gran variedad de semillas comestibles, de las cuales se ha desaprovechado su rico valor nutricional como un alimento completo, por lo regular se emplean como ingrediente adicional de alguna receta convencional en la comida tradicional, sin embargo por si solas son un alimento natural que debes tomar en cuenta para incluirlo en tu dieta diaria, aportan nutrientes esenciales como proteínas, carbohidratos, vitaminas, fibra, grasa vegetal y minerales.

Cómo consumir semillas

TIPS

*     Molerlas antes de consumir. No compres semillas trituradas: al partir las semillas pierden rápidamente sus propiedades y sus aceites se enrancian. Puedes usar un mortero, un mixer o licuadora.

*     De preferencia consumirlas crudas, si las vas a tostar que sea lo menos posible. El calor destruye los nutrientes.

*     SIEMPRE LAVARLAS ANTES DE CONSUMIR. Las semillas pueden contener bacterias y principalmente hongos. Es recomendable lavarlas y sumergirlas en agua con peroxido de hidrógeno (1 cda sopera por cada litro de agua) durante 10 minutos.

*     Comprá envases cerrados y no las que vienen a granel (son más factibles de estar contaminadas).

*     Incorporalas a todas tus comidas: Podés tenerlas listas en un recipiente de vidrio con tapa hermética, mezclá y/o triturá tus semillas preferidas y guardarlas en la heladera no más de una semana.

*     Ideal: armá un germinador casero y disfrutá de germinados ricos en nutrientes y vitaminas FRESCOS todos los días.

Procedimiento: lavar las semillas, colocarlas en un frasco de vidrio limpio (si es esterilizado mejor) tipo mermelada, colocarle en la boca del frasco una gasa sujeta con una goma elástica para evitar que entren insectos, dejar el frasco acostado en un lugar con poca luz. Agregar suavemente agua para lavar  2 o 3 veces al día y dejar escurrir, volver a la posicion acostada. En pocos días, lo que va a  depender de la semilla elegida, verás brotar las semillas. Cuando tengas 2 o 3 cm y empiezen a aparecer las primera hojitas ya pueden ser consumidas.