Bronceado natural sin sol
Lograr una piel bronceada pero cuidando la salud es posible.
Los rayos solares son cada vez más nocivos debido al adelgazamiento de la capa de ozono, y debemos cuidarnos de los rayos ultravioleta todo el año. Pero en verano queremos lucir un cuerpo bronceado. Entonces, qué hacer? Usar protector solar o bronceador?
La radiación UV además de quemar la piel en el momento de la exposición tiene efectos prolongados en el tiempo, genera radicales libres que destruyen el colágeno y provocan envejecimiento prematuro, produce manchas difíciles de eliminar, especialmente en pieles morenas, y luego de varios años de la exposición se relaciona con la aparición de cáncer de piel.
Por suerte, existen productos capaces de broncear la piel sin la necesidad de estar horas planchados bajo el sol y sin exponerse a Radiación nociva para la salud. Entre ellos encontramos cremas autobronceantes. Sus componentes son capaces de dar tono bronceado a partir de los 20-30 minutos de aplicado sobre la piel. Para un mejor resultado conviene realizar una exfoliación previa de la piel. Requiere de una aplicación pareja para evitar manchas pero los resultados son inmediatos.
Los sprays autobronceantes tienen la ventaja de ser más fáciles de aplicar y el resultado es igual de rápido. Lo que hacen es producir una reacción de coloración en la piel cuando entra en contacto con ella que es irreversible, pero la piel se renueva cada 7 días, por lo tanto se necesita de aplicaciones repetidas para mantener el bronceado, de lo contrario se va perdiendo el color a medida que la piel se renueva.
Como complemento acelerador y prolongador del bronceado existen ingredientes activos naturales como el Urucum (o Bixa Orellana) del que se extraen carotenoides a partir de sus semillas, las cuales son ricas en bixina y norbixina, responsables de sus cualidades antioxidantes y colorantes. Como beneficio extra el Urucum ayuda a la generación de colágeno, y sus propiedades anti radicales libres lo hacen un complemento ideal para cuidar tu piel además de broncearla.
Este activo se puede consumir en cápsulas, 2 veces por día, y en aceites, cremas y lociones.
Recordar que el uso de estos productos no protege de los daños del sol ni sustituyen el uso de protector solar, solo dan color.
El bronceado artificial es una gran alternativa para estar siempre radiante y no agredir nuestro capital más preciado: una piel joven y sana
